Una endodoncia es el último recurso para recuperar una pieza dental cuya caries ya ha llegado al nervio. Sin embargo, es un procedimiento que debe ser realizado por un profesional de la materia. Por ello, en este artículo te explicamos cómo identificar una endodoncia mal hecha y qué hacer al respecto ¡Sigue leyendo!
Cuando es necesario llevar a cabo una endodoncia
Empecemos por el principio. Como paciente, es indispensable que entiendas cuándo debes someterte a un procedimiento de este tipo, especialmente en aquellas situaciones donde existen alternativas más conservadoras. Factores genéticos, nutricionales o de higiene dental pueden propiciar la aparición de una caries.
Es motivo para concertar una visita con tu dentista de confianza con el propósito de llevar a cabo una restauración dental. En caso de no eliminar la parte del esmalte encariada con un empaste, la caries seguirá avanzando, destruyendo toda la estructura hasta llegar a la dentina, y finalmente al nervio dental.
Una vez accede al nervio tiene lugar la necrosis dental. A partir de aquí, la única alternativa es endodonciar la pieza dental o acometer un tratamiento de conductos. De lo contrario, el diente se acabará cayendo y solo podrá ser sustituido por un implante. La Asociación Española de Endodoncia trabaja de forma permanente en la mejora de este procedimiento.
Principales síntomas de una endodoncia mal hecha
En Clínica Barreiro contamos con profesionales especializados en este tipo de tratamientos. Los resultados suelen ser definitivos y se recupera la funcionalidad de la pieza dental afectada. No obstante, en el caso de que no se haya ejecutado correctamente, es posible experimentar síntomas como los que siguen:
- La pieza dental sigue doliendo. Se utiliza anestesia local y pueden aparecer molestias durante las horas posteriores a la intervención. Sin embargo, dicho dolor debería ir disipándose con el paso del tiempo.
- Molestias al masticar. El objetivo es que puedas volver a comer con normalidad con esta pieza. En caso de presentar presión o molestias al masticar, es preciso revisar el tratamiento.
- Inflamación en la encía y la zona. La inflamación en la encía del diente afectado u otras molestias en la zona son síntomas anómalos que reclaman la intervención de tu odontólogo.
Para ampliar información sobre las endodoncias, te recomendamos consultar este artículo sobre sus mitos y realidades.
Por qué se ha realizado mal una endodoncia
Al abordar un tratamiento de estas características, es necesario llevarlo a cabo con gran precisión. Durante este proceso es conveniente realizar cinco radiografías para entender la situación de forma holística. Prescindir de este paso puede traducirse en una endodoncia mal ejecutada.
En algunos casos, localizar todos los conductos puede llegar a ser muy complejo. Si llegan a obturarse, quedarán restos de bacterias que seguirán infectando al diente. Asimismo, en el caso de que el diente presente algún tipo de fisura o fractura, la única opción posible es la exodoncia y su posterior sustitución por implantes.
Por último, otro de los errores más comunes que afectan al resultado final es no calcular adecuadamente la longitud de los conductos. Si queda demasiado larga o corta, a buen seguro comportará problemas.
¿Cómo actuar al respecto si identificas una endodoncia mal hecha?
Cuando te encuentras con una situación de estas características, lo mejor es que acudas a un profesional para que evalúe tu caso de forma personalizada. De hecho, en algunos casos, el dolor puede deberse a otros motivos. Sin embargo, si fuera necesario, puede llevarse a cabo lo que técnicamente se conoce como una reendodoncia.
En Clínica Barreiro disponemos de una dilatada experiencia en la práctica de una endodoncia utilizando la tecnología más puntera del mercado. Ponte en contacto con nosotros y reserva hoy mismo tu cita con nosotros.