La salud bucodental se consigue, entre otras cosas, gracias a una higiene dental perfecta. Y nuestra labor principal dentro de esa higiene bucodental es el cepillado de dientes. Adicionalmente, se pueden utilizar cepillos para acceder a zonas más difíciles o colutorios. Pero, en cualquier caso, el cepillado es la base de la higiene.
La técnica de cepillado correcta
Un buen cepillado de dientes se realiza en dos minutos. En caso de que no estés acostumbrado a este tiempo, puedes utilizar un temporizador hasta conseguirlo. La idea es realizar movimientos pequeños y suaves, sin fuerza, para evitar daños en el esmalte. El ángulo que forma el cepillo de dientes con la encía debería ser de 45º.
Algunos de los consejos para cepillar cada zona son los siguientes:
– Incide en la limpieza especialmente en la línea entre las piezas dentales y la encía. Allí se acumula con frecuencia la suciedad y se puede producir el depósito de sarro.
– No olvides de cepillar lengua y mejillas en el interior. Estas zonas también contienen bacterias y restos de alimentos que hay que eliminar.
– El orden recomendado es limpiar la superficie de dientes superiores, después dientes inferiores y luego pasar a la superficie interna de interiores y superiores.
– La limpieza de la superficie de masticación de los molares debe hacerse con movimientos cortos. Lo ideal es hacerlo de atrás hacia delante y viceversa.
¿Qué cepillo de dientes debería usar?
La elección de un cepillo de dientes adecuado puede hacer mucho por la higiene bucal. La diferencia entre un cepillo de dientes eléctrico y uno manual solo depende de la destreza de la persona que lo utiliza. Si la técnica de cepillado no es buena o no hay movilidad suficiente, se prefiere optar por el eléctrico. Si no, cualquiera de los dos es recomendable.
El cabezal debería ser de dureza suave o media y, si es de pequeño tamaño, nos permitirá acceder a zonas más ocultas como los dientes más profundos.
Frecuencia para cambiar el cepillo de dientes
La recomendación general es cambiarlo cada tres meses. Sin embargo, si has visto que tiene signos de desgaste, habrá que reemplazarlo con más frecuencia. Por otro lado, si has sufrido algún resfriado o enfermedad que pueda haber hecho que tu cepillo guarde bacterias, también se recomienda desecharlo.
¿Qué pasta de dientes acompaño al cepillado de dientes?
El uso de una u otra pasta de dientes también puede influir en la higiene de nuestra boca. Lo más recomendable es consultar con tu odontólogo para que te recomiende una que sea personalizada para ti. Lo más frecuente es optar por algunas que son buenas para dientes sensibles, bocas con tendencia a acumular sarro o bien para las personas que padecen gingivitis con facilidad. En cualquier caso, un especialista te recomendará la mejor para ti.
Otras recomendaciones relacionadas con la higiene bucodental
Además de todo lo comentado en relación al cepillado, hay que seguir otras recomendaciones como:
– Dieta saludable y equilibrada. Esto nos permitirá que no haya un exceso de azúcar que provoque caries, por ejemplo.
– Realización de limpiezas dentales profesionales cada cierto tiempo. Tu dentista te recomendará cuál es la frecuencia con la que deberías realizar una, pero por lo general se habla de una o dos cada año.
– Uso de seda dental o cepillos interdentales. Esto, adicionalmente al cepillado de dientes, ayudará a eliminar restos de comida que originarán caries y sarro.
En definitiva, si quieres tener una salud bucodental envidiable, no dudes en seguir estos consejos. De esta forma, conseguirás que la higiene sea máxima con el cepillado y así evitarás la aparición de enfermedades en tu boca.
En Clínica Barreiro podemos enseñarte cómo cepillarte los dientes en función de tus necesidades. Solicítanos ahora una cita.