La higiene dental de tu boca no solo depende de un cepillado correcto. Existen diferentes formas de complementarla de manera que sea más profunda. En este caso vamos a explicarte qué es y en qué consiste el irrigador dental, cómo funciona y cómo debes usarlo.
¿Qué es un irrigador dental?
Es un instrumento que funciona con un sistema de agua o chorro pulsátil. Este chorro produce una presión que elimina esos restos de comida a los que no llegas con el cepillo.
Pero no solamente es capaz de eliminar los restos de alimentos. También elimina la placa bacteriana que no se elimina con el cepillado o el hilo dental.
¿Cómo funciona?
Los irrigadores tienen una tecnología muy similar, aunque los encuentres con diferentes nombres comerciales. Su funcionamiento básico se basa en:
– Un depósito donde se coloca el agua.
– Una bomba que ejerce la presión.
– Una boquilla que se utiliza para la aplicación del chorro. Las boquillas pueden ser especiales para diferentes necesidades de limpieza. Por ejemplo, existen boquillas para ortodoncias, las que son específicas para implantes y las linguales.
¿Qué personas deben usar el irrigador dental?
Los irrigadores los puede utilizar cualquier persona. Mejoran la higiene bucal haciéndola más profunda. Además, utilizados con frecuencia previenen las enfermedades dentales y periodontales.
Debes saber que, en principio, no están indicados únicamente si tienes problemas dentales, es decir, puedes usarlos como prevención. Los niños tienen disponibles modelos especialmente diseñados para ellos. Sin embargo, en los siguientes casos está recomendada su utilización:
– En personas que lleven brackets ya que facilitan su limpieza.
– Para quienes tengan implantes dentales.
– En las personas que sufren gingivitis o periodontitis.
¿Cuántas veces debes utilizarlo?
Puedes utilizar el irrigador dental tras cada cepillado dental. Y el tiempo estimado de uso es de unos 5 minutos como máximo cada vez. Eso sí, se recomienda dejar pasar un intervalo de al menos dos horas para volver a utilizarlo.
¿Puedes usar agua del grifo?
Los irrigadores los puedes usar con agua del grifo sin problema. No tienes que usar agua mineral o aditivos.
¿El irrigador es de uso exclusivo para una persona?
Las boquillas se pueden cambiar, y por este motivo pueden usarlo diferentes personas. Conviene tener los recambios de diferentes colores.
De esta forma cada miembro de la familia utilice el suyo y no haya lugar a equivocaciones. Por tanto, puedes comprar un hidropulsor para varios miembros de la familia.
¿El hidropulsor se puede utilizar con enjuague bucal?
Pues puedes utilizar enjuague diluido en una proporción de 50% como máximo. Pero, como te hemos comentado, no es necesario. Ya que con el solo uso de agua es suficiente. Y, por supuesto, lo que no se recomienda es incluir bicarbonato u otro tipo de productos como cloro.
Los beneficios de un irrigador dental
Estos complementos de la higiene dental son recomendados por los higienistas y dentistas, además existen algunos estudios clínicos que demuestran su eficacia. De hecho se ha determinado que elimina la placa y mejora la salud de las encías.
Pero, además, los siguientes beneficios pueden ser muy interesantes. Conócelos para tenerlos en cuenta:
– Son instrumentos muy sencillos de utilizar y son mucho más eficaces que el hilo dental.
– Ayudan en la reducción de la inflamación y en el sangrado de las encías.
– Ayudan a reducir la placa dental y los restos de las comidas difíciles de eliminar por estar en zonas poco accesibles.
– Mejoran la salud de las encías, en caso de llevar implantes.
– Ayudan a eliminar la placa en los aparatos de ortodoncia.
– Previenen y reduce el mal aliento.
– Previenen la formación del sarro.
– Generan sensación de limpieza y frescor.
Desde Clínica Barreiro te recomendamos el uso en tu higiene dental del irrigador. Y si tienes dudas, estamos a tu disposición para tus consultas.