La dentición en los adultos consta de 32 piezas dentales, cuya integridad es imprescindible para la masticación. También intervienen en otras funciones relacionadas con la cavidad oral como la fonación y, en conjunto con los maxilares, sirven de apoyo a los tejidos blandos de tu cara.
Esmalte dental
Está integrado básicamente por minerales, lo que le confiere su particular dureza. Has de saber que es el más elevado de todos los tejidos del cuerpo. Esta capa es translúcida y recubre cada diente en su parte visible, la corona. Está formada por un 95 % de sustancias minerales, mayoritariamente hidroxiapatita de calcio, y 2 % de proteínas.
Cuando los odontólogos te recomiendan dentífricos con alto contenido de flúor, es para favorecer la formación de fluorhidroxiapatita, que es más resistente a las caries y cierra los poros del esmalte.
Dentina
Esta capa del diente es la intermedia y conforma toda la anatomía, desde la cara oclusal y las cúspides hasta la raíz. Contiene menos minerales que el esmalte, que constituyen un 80 % de su composición. El resto son principalmente proteínas, lo que permite que la dentina posea una capacidad de adaptación, aunque limitada.
La dentina contiene túbulos llenos de líquido en los que existen prolongaciones neuronales provenientes de la pulpa dental, por lo que es muy sensible. El movimiento de este líquido es en parte el responsable cuando sientes dolor en un diente.
Cemento
El cemento recubre exclusivamente la raíz de tus dientes. Es una capa también de gran dureza pero menor a la de las dos previas. Es un tipo de tejido conectivo con una alta especialización y su composición es de hidroxiapatita de calcio en un 55 %. Es una capa opaca y amarillenta, más gruesa en la parte final de las raíces. Permite que las fibras de colágeno del ligamento periodontal se fijen a los dientes, lo que contribuye a su estabilidad.
Pulpa dental
Es la parte más interna del diente y contiene las terminaciones nerviosas y los vasos, que son una vena y una arteria. Tiene dos partes: la pulpa coronal o cameral, que se encuentra dentro de la corona y la pulpa radicular, que desciende por la raíces y atraviesa finos canales para conectar con el maxilar. Sin embargo, no debes pensar que son independientes, pues conforman una unidad.
Cuando la pulpa queda expuesta por una caries o fractura, puede infectarse y generarte una pulpitis. Esta parte del diente tiene función defensiva y reparadora, ya que contiene odontoblastos, que son células capaces de generar dentina.
Periodonto
Esta estructura está compuesta por varios elementos anatómicos. En conjunto, su función es fijar y sustentar las piezas dentales.
1. El más cercano al diente es el cemento. Sirve para unir la pieza dental al ligamento periodontal y recubre totalmente las raíces.
2. El ligamento es el más importante elemento de fijación. Además, resiste impactos y distribuye las cargas cuando masticas.
3. Otro componente del periodonto es la encía, una mucosa queratinizada que forma parte de la del resto de cavidad oral y cubre el diente hasta el cuello. Si sufres de periodontitis, puedes sufrir la pérdida de las piezas dentales.
Alvéolo dentario
también forma parte del periodonto, pero pertenece a la mandíbula. Es la cavidad ósea del maxilar donde se alojan las piezas y tiene la forma exacta de las raíces. Cada uno está separado de los adyacentes por el tabique alveolar y revestido de la membrana alveolar. Esta última estructura, al igual que la pulpa, se encarga de nutrir al diente, pues contiene vasos sanguíneos y terminaciones nerviosas.
La dentición, como habrás podido ver, es un complejo y delicado conjunto de estructuras con varias funciones. Solicita una cita en la Clínica Barreiro para la revisión de tu salud bucodental.