Dentro de las principales afecciones dentales que puedes sufrir, una de ellas es la pulpitis. ¿Ya conoces sus síntomas principales y cuál es el tratamiento que debes llevar a cabo? En este post queremos contarte todo lo que necesitas saber para tener una correcta salud bucodental. ¡Empezamos!
¿Qué es esta enfermedad?
La pulpitis hace referencia a una inflamación de toda la parte pulpar de cada uno de los dientes. Se trata de un tejido blando, que contiene nervios y células, además de los vasos sanguíneos, y que se encuentra en el interior de la dentina. Este tipo de enfermedad está relacionada con la presencia de caries.
Sin embargo, otras afecciones como el bruxismo, un traumatismo o infecciones varias también pueden ser los causantes. Actualmente, podemos encontrar diferentes tipos. Es importante saber cómo se trata el bruxismo según el Consejo de Dentistas.
Tipos de pulpitis
Cuando hablamos de este tipo de infección, generalmente nos referimos a tres tipos. Los principales que debes conocer son los siguientes.
- Reversible: Cuando tratamos esta enfermedad en su fase inicial, podemos llegar a revertir los síntomas. El tiempo es clave.
- Irreversible: Si no llegamos a tiempo, será necesaria la extracción dental. En estos casos, una endodoncia tampoco es posible.
- Hiperplásica: En unos momentos de la infección, la pulpa dental puede comunicarse con el resto de la boca. Afecta a otros tejidos. En estos casos, observamos una mancha rosada en el diente.
Síntomas principales
Una de las principales manifestaciones de esta enfermedad es el dolor. Su intensidad puede ser variable, pero principalmente se percibe de dos modos. Por un lado, en forma de hipersensibilidad dental al consumir un alimento muy caliente o muy frío. Cuando aparecen estos casos, hablamos de una situación reversible.
Sin embargo, si al aplicar el estímulo no se siente dolor, sino que este aparece después, ya hablaremos de un caso irreversible. En algunos casos, pueden llegar a existir dificultades para localizar el origen del diente que provoca el daño. Este puede cesar al cabo de unos días. Se da una situación de necrosis pulpar.
Con el diente muerto, no responde a estímulos como el calor o el frío. No obstante, se vuelve mucho más sensible a la presión. Por tanto, con el desgaste, se puede llegar a caer esta pieza dental. También en el caso de que muerdas algún alimento duro o difícil de masticar.
Tratamientos para la pulpitis y las caries
La caries es, sin duda, el origen principal de esta enfermedad. Una caries mal tratada puede ser una fuente grande de infección para la boca. Por tanto, cuando uno de nuestros profesionales localiza este problema, receta antibióticos y antiinflamatorios para el dolor. En el caso de ser un caso reversible, la solución es eliminar el tejido encariado. Se hace un recubrimiento pulpar en la pieza dental y, posteriormente, se lleva a cabo un empaste.
En el caso de que la infección pulpar sea más antigua, el tratamiento también será más complejo. En primer lugar, se recetarán antibióticos; posteriormente, se extraerá la pulpa dental mediante una endodoncia. Finalmente, se llevará a cabo la desinfección de los conductos y se taponará la zona.
Para prevenir su aparición es de vital importancia que lleves a cabo una buena higiene dental. Beber mucha agua y seguir una alimentación adecuada también contribuirá a que no aparezca la caries en tus dientes.
Como conclusión, la pulpitis es una de las principales infecciones que afectan de forma directa a la salud bucodental. En Clínica Barreiro contamos con un amplio equipo de profesionales. Ponte en contacto con nosotros y solicita tu primera cita para hacer una revisión o un diagnóstico.