Los empastes dentales son, sin duda, uno de los procesos más demandados en cualquier clínica dental. Son una de las soluciones más habituales cuando tienes caries ¿Conoces qué es un empaste y los diferentes tipos que tienes a tu disposición? En este post te explicamos todo lo que necesitas saber ¡Empezamos!
¿Qué es un empaste dental?
También puedes conocerlo como obturación dental. Es el procedimiento por el que apostamos los dentistas para tratar una caries en su fase más inicial. El objetivo es eliminar la caries de la pieza dental que haya sido afectada y, posteriormente, limpiar toda la cavidad bucal. Finalmente, se aplica un poco de composite para rellenar el agujero.
De esta forma, se consigue devolver al diente la funcionalidad original durante mucho tiempo. Es un tratamiento totalmente conservador, ya que si la caries sigue avanzando, habría que realizar una endodoncia o incluso una extracción.
Los diferentes tipos de empastes dentales
En función de la cantidad de esmalte que se haya encariado, podemos encontrar dos tipos principales de empastes. Los principales son los siguientes:
- Empaste simple: Son los que se usan cuando la caries es aún mínima. En este sentido, la reconstrucción es realmente pequeña. Por ejemplo, es muy típico apostar por este tipo en los surcos centrales de las muelas.
- Empaste compuesto: En cambio, estos tipos se usan cuando la destrucción del diente es de mayores dimensiones. Por tanto, el dentista tendrá que restaurar una mayor cantidad de esmalte o de dentina. Este es muy utilizado en las paredes del diente.
Los materiales principales que se utilizan en los empastes dentales
- Uno de los más comunes que se pueden emplear son la resina o el composite. Esto es porque imitan muy bien el color del diente y, en consecuencia, son muy estéticos. Su única desventaja es la duración, ya que su vida útil es más corta que otros tipos.
- El composite ha venido a sustituir a los de tipo metálico o de amalgama, muy comunes hace algunos años. La principal ventaja que te ofrece este tipo de empaste es su duración. Pueden llegar a estar hasta 30 años en tu boca sin ningún tipo de problema.
No obstante, estos últimos son muy antiestéticos, ya que son plateados. Por ello, no se acostumbran a colocar y únicamente se reservan para las muelas. Son dientes que no se ven y que tienen que hacer mucha fuerza al morder. El Colegio de Dentistas confirma que este tipo de materiales son de calidad.
También puedes disponer de empastes de porcelana o de ionómero vítreo.
Proceso para elaborar un empaste dental en la clínica dental
El primer paso antes de decidir realizar un empaste es la detección de la caries. Una vez el profesional ha detectado este tipo de infección en tu boca, valorará si es necesaria la aplicación de la anestesia local. Si la caries es muy temprana y solo afecta al esmalte no será necesario. Sin embargo, si ya ha llegado a la dentina, sí se recomienda, puesto que hay algunos nervios y podría dolerte durante el procedimiento.
Posteriormente, se aislará la pieza para evitar que tu saliva pueda llegar a la pieza dental. La zona debe estar seca en todo momento para que el resultado pueda ser positivo. Mediante unas fresas dentales, el odontólogo retira todo el tejido que se haya encariado. Finalmente, se procederá a la reconstrucción del diente mediante composite.
Con una lámpara de luz conseguirá que se seque y se endurezca. Todo este proceso hará que recuperes tu salud bucodental, devolviendo la estética y la funcionalidad. Con unas fresas de pulido le dará los últimos retoques. Sin embargo, es importante cepillarte los dientes correctamente para evitar este tipo de problemas.
Como conclusión, los empastes son uno de los tratamientos más comunes en odontología. En la Clínica Barreiro contamos con profesionales que cuidarán tu salud bucodental. Ponte en contacto con nosotros y solicita tu primera cita.